Al salir del hospital psiquiátrico, la obligaron a casarse con Yael, el famoso heredero de una poderosa familia, quien, tras un accidente de tráfico hace dos años, quedó discapacitado e impotente. Mientras todos se burlaban de Yael por tener como esposa a una idiota, ella sorprendió a todos con sus increíbles talentos secretos: no solo era una doctora excepcional y experta en artes marciales, ¡sino que además poseía una fortuna capaz de hundir toda la ciudad en monedas!Las damas adineradas , llenas de envidia, se quejaron de ella ante Yael, pero él simplemente sonrió con orgullo y les respondió:-Mi esposa es solo una tontita suave y gentil.